Contrapunto por Miguel Ángel Gómez Ruiz
Contrapunto
Poder Judicial, sigue la mata dando
Sofía Martínez no tiene nada qué hacer frente a la experiencia de Yolanda Cecilia Castañeda Palmeros.
Tres meses después de que el Tribunal Superior de Justicia del Estado de Veracruz (TSJEV) suspendiera labores a causa de la pandemia de Covid-19 que ha afectado a todo el mundo, su presidenta, Sofía Martínez Huerta, ordenó que se sanitizaran las oficinas centrales en Xalapa, las ciudades judiciales y juzgados repartidos en toda la entidad.
Sí, leyó usted bien, tres meses después, pues hay que recordar que las labores se suspendieron desde el 17 de marzo y ya estamos a 17 de junio. El lunes se sanitizaron los lugares en donde trabaja el escaso personal de guardia asignado. Por lo demás, la justicia sigue detenida en Veracruz.
Es tal la indiferencia de Martínez Huerta que hasta el día de hoy no se ha informado de acciones que permitan que en un futuro cercano, se efectúen audiencias de manera virtual para dar celeridad a los asuntos más importantes. Es cierto, al día de hoy algunas áreas son representadas por trabajadores que se jugaron la vida ante la indiferencia de la titular pero en casi nada se avanzó.
Aparentemente, a fin de mes se reanudarían labores en el TSJEV, sin embargo, para como están las cosas y siendo Veracruz uno de los seis estados que reportan más contagios nadie duda que el Consejo de la Judicatura Federal volvería a extender el plazo para confinar a la mayor parte de los trabajadores del Poder Judicial y a ello se tienen que alinear los poderes estatales.
En opinión de magistrados, abogados y hasta trabajadores del Poder Judicial en Veracruz, la elección de la presidenta del TSJEV en diciembre del año pasado fue un error y al parecer, un error gravísimo, pues todo está de cabeza en ese poder.
Su nombramiento convino al súper delegado en Veracruz y además, su primo, Manuel Huerta Ladrón de Guevara. Es cierto, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez, sólo propuso y quienes hicieron y deshicieron fueron los diputados locales. Eligieron a trece magistrados provenientes de Morena y poco después, ocurrió la ausencia de justicia al nombrar a Martínez Huerta presidenta con apenas un mes como magistrada.
Digo, no está desamparada en el tema de justicia o al menos así parece. Su pareja, Dionisio Gutiérrez es un hombre que ocupó una magistratura. Se supone que sabe. Sus compañeros denuncian que siendo magistrado litigaba casos, pero eso ya es tema de otro análisis.
El resto de sus allegados, la mayoría improvisados, le han ocasionado más problemas que soluciones.
El detalle es que la ausencia de justicia en Veracruz es impresionante. Hay muchos, cientos, miles de casos que necesitan una resolución y mientras siga el encierro y sigan detenidas las labores en el TSJEV no habrá justicia y la presidenta, no tiene ninguna idea de cómo salir de todo esto.
A bastantes calles del edificio del TSJEV, la magistrada Yolanda Castañeda Palmeros sigue preparándose, atendiendo vía telefónica y en línea a abogados, colaboradores y amigos que la respaldan. Todos, convencidos que estando como presidenta, las cosas serían muy distintas.
Talento lo tiene, la preparación también y sus credenciales superan mil a uno a la presidenta actual. No es una cuestión de que se recuerde a propósito pues sólo Sofía Martínez sabe si es capaz o no. Lo importante es que el gobernador Cuitláhuac García Jiménez y aquellos que se desgarraron las vestiduras para colocar como un adorno a Martínez Huerta deben darse cuenta que se equivocaron.
Como decía alguien hace unos días: “No entiendo como una persona tan capacitada en 48 años de trayectoria, no haya sido tomada en cuenta y coloquen a una improvisada que ni siquiera sabe dónde está parada”. Y acaso el abogado tenía razón. Nadie lo entiende.
Si algunos no lo saben, Yolanda Cecilia Castañeda Palmeros es magistrada supernumeraria. Premio al Mérito Judicial. La mejor estudiante con el mejor promedio en su generación. Con maestrías y doctorados. Con varios libros escritos. Con cursos y especialidades en universidades de España y Estados Unidos. Juez en 16 juzgados, ocho civiles y ocho penales. Con 48 años de brillante labor en un Poder Judicial que conoce de la A a la Z.
¿Y Sofía Martínez Huerta? Su currículo está guardado y no fue ni siquiera, juez municipal.
¿Alianzas para 2021?
En 2021 –año de elecciones federales y 15 gubernaturas y congresos locales- podría ocurrir lo inimaginable. El Partido Acción Nacional (PAN), la segunda fuerza electoral en el país, podría aliarse en algunos estados –si no es que en todo el país- con el Partido Revolucionario Institucional (PRI), así como con el Partido de la Revolución Democrática (PRD), Movimiento Ciudadano (MC) y posiblemente con México Libre para ir juntos a tratar de derrotar a Morena y sus partidos satélite.
No es descabellado, ni el PAN ni el PRI ni mucho menos el PRD deberían preocuparse tanto, lo peor que tenían se pasó a Morena y ahora Morena tendrá que lidiar con sus fantasmas. Con el posible fraude cometido por Yeidckol Polevnsky por más de 380 millones de pesos. Con el pasado de Jesús Ramírez Cuellar y su romance con la esposa del presidente. Con las decisiones que ha tomado Morena y la mala actuación de la mayoría de sus alcaldes –casi todos elegidos, como sus diputados, en una tómbola- y otros yerros que no tienen precisamente contenta a la población.
De ahí la urgencia de Morena por aterrizar los programas paternalistas para controlar a los pobres y si eso ocurre, habría que preguntar ¿Qué quedará de nuestro país si Morena sigue en el poder sin nadie que le haga contrapeso?
Ojalá y hubiera una competencia justa, pareja, pero vemos a un gobierno federal empecinado en tomar el control de todo y si eso no asusta a más de uno, deberían preocuparse. Pareciera que no, pero este país está encaminado a una dictadura o un sistema socialista al que no le auguramos nada bueno.
¡Quédate en casa!
Redacción/RCK Noticias/Xalapa, Ver.
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